Lavr Kornilov

"Personajes" que dejaron o pretendieron dejar huella en la Historia Militar de la Gran Guerra.

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jlchinchilla
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Lavr Kornilov

Mensaje por jlchinchilla »

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“El corazón de un león, el cerebro de una oveja”. Palabras del general Alexeiev, refiriéndose a Kornilov.

El cosaco asiático

Lavr Georgiyevich Kornilov nació el 30 de agosto de 1870 en Ust-Kamenogorsk, en el Turkestán ruso (actual Kazajstán). Hijo de un militar y pequeño terrateniente cosaco y de su esposa kazaja, se graduó como oficial de artillería en 1892 y en la Academia de Estado Mayor en 1895.

Kornilov inició su carrera como oficial de inteligencia en el Ejército Imperial. Entre 1890 y 1904 encabezó varias misiones de exploración en el Turkestán Oriental, Afganistán y Persia, aprendiendo varios idiomas locales y entablando buenas relaciones con la población nativa. Su propia guardia personal estaría formada por turcomanos de Tekke, vestidos con llamativas guerreras escarlatas. Probablemente fue allí, en aquellas tierras tan lejos de Europa donde el medio asiático militar adoptó las características que definirían sus futuras actuaciones: antioccidentalismo, antiintelectualismo, autoritarismo y predominio de la acción sobre la reflexión.

Durante la Guerra Ruso-Japonesa recibió la Cruz de S. Jorge al valor y fue ascendido al rango de coronel. Sirvió como enlace militar en China desde 1907 a 1911.

Héroe de la Gran Guerra… por desobedecer las órdenes

Ya como general, mandó la 48ª División de Infantería al inicio de la Gran Guerra. Fue herido y capturado por los austriacos el 12 de mayo de 1915 en Przemsyl, cuando su división fue rodeada y aislada del resto de fuerzas rusas tras desobedecer la orden de retirarse del frente. En julio de 1916 escapó del cautiverio disfrazándose de soldado austriaco y regresó a pie a Rusia, donde fue recibido como un héroe, lo que le libró del castigo por desobediencia y le promovió al mando del XXV Cuerpo en el Frente Sudoeste.

Al llegar el Gobierno Provisional en 1917 tras la caída de Nicolás II (a quien Kornilov no tenía ningún aprecio) recibió el mando del Distrito Militar de Petrogrado. El 20 de abril de 1917 hubo en la capital una gran manifestación de obreros y soldados. Kornilov intentó convencer al Gobierno Provisional de que le dejara usar las tropas para dispersarlos. El Gobierno se negó y el general presentó su renuncia.

Volvió a la lucha en la ofensiva de verano en Galitzia. La ofensiva rusa comenzó el 1 de julio. Brusilov lanzó tres ejércitos en dirección a Lemberg (de norte a sur, los ejércitos XI, VII y VIII) contra el III Ejército Austrohúngaro. El esfuerzo principal le correspondió al VIII Ejército de Kornilov, que fue el único que consiguió progresiones importantes y capturó 35000 prisioneros. Pero el día 19 los alemanes del X Ejército lanzaron una poderosa contraofensiva que rechazó a los rusos a su frontera con Bucovina, más allá de la línea inicial de partida. El desastre fue total y más que retirada lo que hubo fue una desbandada de la mayoría de las tropas.

Un Comandante en Jefe golpista

El 1 de agosto es nombrado Comandante en Jefe del Ejército, sustituyendo a Brusilov. Los círculos derechistas ya empiezan a considerarlo como el salvador de la nación. Su origen plebeyo lo convertía en una figura popular en 1917, puesto que casi todos los generales provenían de la aristocracia. Su meteórico ascenso se debió a su audacia y a su valor, pero también a haberse cultivado su propio “culto a la valentía”.

Lo primero que hizo Kornilov fue colocar ante el Gobierno Provisional una lista de demandas para restaurar con mano de hierro la disciplina en el país, que el Gobierno rechazó.

Kornilov se convirtió en el favorito de los círculos derechistas y reaccionarios, tanto civiles como militares. Sus lecturas sobre Napoleón y las palabras de los derechistas le hicieron creerse que estaba destinado a ser el salvador de la patria. Kornilov apenas sabía de política. Detrás de él estaba Boris Savinkov, Ministro de la Guerra y antiguo terrorista eserista ahora reconvertido en político derechista. Fue Savinkov quién hizo que Kornilov fuera nombrado Comandante en Jefe. Rápidamente Kornilov se hizo difícil de controlar por el Primer Ministro Kérensky. El general buscaba la dictadura militar para así, según él y los suyos, salvar al Gobierno y a Rusia del desastre. El 10 de agosto apareció en la sede del Gobierno acompañado de sus guardias y se enzarzó en una discusión a gritos con Kérensky, tras lo que ordenó al III Cuerpo de Caballería estacionarse en Velikie Luki, desde donde podía ser enviado a la capital.

Mientras Kérensky iba perdiendo apoyo político y debilitándose, Kornilov los recibía por parte de las derechas que ya habían encontrado en él al hombre providencial para salvar a Rusia.

El 19 de agosto, los alemanes derrotan al XII Ejército en el Frente Norte y toman Riga al día siguiente, amenazando con avanzar hacia Petrogrado.

Savinkov comunicó a Kornilov que los bolcheviques preparaban una insurrección armada para finales de agosto, lo que no era del todo falso, pues en el VI Congreso (26 de julio al 3 de agosto) los bolcheviques decidieron un alzamiento para no más tarde de septiembre-octubre. Entonces apareció en escena un tal Vladimir Lvov, un diputado de la cuarta Duma, antiguo procurador del Santo Sínodo, politiquillo de tres al cuarto que acabaría sus días mendigando en las calles de París. Lvov se ofreció para mediar en el Jefe del Gobierno y el Comandante en Jefe. Se dirigió a Kérensky el 22 de agosto y se ofreció como mensajero ante Kornilov para crear un gobierno fuerte. Kérensky diría más tarde que él no había mandado a Lvov a nada, pero el caso es que éste apareció ante Kornilov el día 24 y le ofreció tres posibilidades: 1) dictadura de Kérensky, 2) dictadura colectiva incluyendo a Kornilov o 3) dictadura de Kornilov. El general dijo que prefería la tercera, pero que estaba dispuesto a negociarlo con Kérensky. El 26, Lvov se vio con Kérensky y le dijo que Kornilov había exigido poderes dictatoriales y la propia dimisión de Kérensky, lo que no se correspondía por lo dicho por el general. A medianoche, Kérensky reunió al Gobierno, consiguió la dimisión de todos los ministros (después de que Savinkov intentara convencerle de que aceptara las ofertas de Kornilov), denunció a Kornilov como conspirador, se autoproclamó como gobernante único de Rusia y se negó a negociar nada más. Kornilov recibió su cese por telegrama y se negó a aceptarlo, pues le había cesado Kérensky y era el Gobierno Provisional quien debía de hacerlo. Así que declaró la ley marcial en la capital y ordenó avanzar a las tropas, tras lo que hizo un llamamiento radiofónico:

“Pueblo ruso:

La madre patria está en vías de desaparecer. La hora final se aproxima.
Obligado a expresarme con claridad, yo, el general Kornilov, afirmo que el Gobierno Provisional actúa bajo la presión de la mayoría bolchevique de los soviets, de pleno acuerdo con el Estado Mayor Alemán, que planea un desembarco en la costa de Riga, destruye el Ejército y desorganiza el país.

Aquellos cuyo corazón late por Rusia, los que creen en Dios y en su Iglesia, rezan a nuestro Señor para que se realice el más grande de los milagros: la salvación de nuestra tierra natal.

Yo, el general Kornilov, hijo de un campesino cosaco, os digo a todos que no deseo nada más que la salvación de la gran Rusia. Juro que gracias a la victoria sobre el enemigo conseguiré llevar al pueblo hasta la Asamblea Constituyente en la que decidirá su propio destino y podrá elegir su forma de gobierno."

Kérensky pidió ayuda al Sóviet de Petrogrado para defender al gobierno y obtuvo una respuesta positiva. El Soviet de la ciudad, enterado de los movimientos de tropas, decidió enfrentarse a ellas. Los ferroviarios obstruyeron las líneas y propagandistas revolucionarios animaban a las tropas a no avanzar. El resultado es que hubo confraternización entre unos y otros y no hubo lucha. Hasta los cosacos y la caballería del Cáucaso se unieron a los enviados del Soviet.

Kornilov fue arrestado el 1 de septiembre junto a una treintena de oficiales y confinado en el Monasterio de Byjov. Pero aquello no era una cárcel, pues la relajación era total: los guardias eran los propios guardaespaldas turcomanos de Kornilov, la comunicación con el exterior era constante y las familias de los presos los visitaban a diario.

Mientras, Kérensky se había quedado solo: la derecha le odiaba y la izquierda pensaba que la intentona golpista era en realidad una pelea entre dos Napoleones, opinión reforzada por el hecho de que no hubo ninguna investigación oficial. La disciplina militar se hundió definitivamente al tener claro los soldados de que sus oficiales habían respaldado el golpe, lo que se tradujo en un incremento de las deserciones.

El Ejército Voluntario

Tras el golpe bolchevique, el 8 de diciembre Kornilov se evadió del Monasterio de Byjov y se puso al frente del regimiento Tekinsky, poniéndose en camino hacia el Don, cuya asamblea cosaca declaró la independencia el día 20, teniendo a Alexei Kaledin como atamán. Cruzando territorio hostil y tras combatir contra los rojos, decidió retirarse y dejar a sus tropas para así seguir solo, viajando disfrazado de campesino…¡en un tren de guardias rojos!

El 19 llegó a Novocherkassk (capital del Don) y allí se reunió con el general Alexeiev y con el embrión del Ejército Voluntario, unos 40 oficiales. Alexeiev se convirtió en el jefe político del llamado Ejército Voluntario, siendo Kornilov su comandante militar. El Ejército Voluntario era un ejército de oficiales. De los primeros 3000 voluntarios no más de una docena eran soldados. Capitanes y hasta coroneles tuvieron que servir como soldados rasos. Alexeiev y el resto de los generales consideraban a Kornilov un agitador y un demagogo, pero era el ídolo de los jóvenes oficiales.

Entre diciembre de 1917 y febrero de 1918 el Ejército Voluntario reclutaría unos 4000 hombres, casi todos oficiales jóvenes y cadetes.

A principios de diciembre, Rostov fue tomada por los rojos ante la indiferencia de la mayoría de los cosacos; Kaledin pidió ayuda al Ejército Voluntario. La creencia en que los cosacos del Don lucharían con los blancos resultó errónea, la mayoría le dieron la espalda a la guerra. El mito del fiero cosaco siempre dispuesto a la lucha se vino abajo. La defensa del Don quedó en manos del Ejército Voluntario y de un puñado de cosacos que Kaledin pudo reunir.

La batalla comenzó en día 9 y duró seis días. Los rojos fueron rechazados de la ciudad.

La “Marcha del Hielo”

El 23 de febrero de 1918 los rojos reconquistaban Rostov. Ya el día 22 Kornilov había ordenado marchar hacia el sur, hacia el Kubán, pues la región del Don resultaba indefendible. Se iniciaba así la épica y terrible “Marcha del Hielo”. Novocherkassk, la capital del Don, cayó el 25 de febrero. El 11 de febrero Kaledin ya se había pegado un tiro.

Las heladas y nevadas estepas contemplaron la marcha del Ejército Voluntario, portando los soldados un fusil cada uno y tirando ellos mismos de algunos cañones, seguido por una larga columna de civiles que huían de los bolcheviques. Cuatro mil hombres, todo el Ejército Voluntario, atravesaron a pie las estepas del Don en medio del frío y del hielo invernales, seguidos por los refugiados que huían de la región. Se caminaba día y noche, evitando los ferrocarriles y los pueblos hostiles, perseguidos por el Ejército Rojo y luchando 40 combates en 50 días. Muchos enfermos y heridos fueron abandonados y se suicidaron antes de caer en manos de los rojos. La larga columna dejó una estela de sangre a su paso. Las poblaciones atravesadas estaban obligadas a alimentar a los soldados, con lo que sufrieron todo tipo de abusos; además, todo sospechoso de simpatizar con los rojos fue asesinado en el acto. Sólo en la aldea de Lezhanka fueron asesinadas 60 personas.

Kornilov aseguraba que “cuanto más grande es el terror, más grande es la victoria”. Consideraba que los objetivos militares debían de cumplirse a cualquier precio, incluyo ocasionando un baño de sangre. “Incluso si tenemos que quemar media Rusia y derramar la sangre de tres cuartas partes de la población, lo haremos si eso es lo que se necesita para salvar a Rusia”, dijo en cierta ocasión.

Última batalla

Tras varias semanas de terrible marcha, el 23 de marzo se les unió el atamán Filimanov y el general Pokrovsky con 3000 cosacos del Kubán. El 10 de abril y con Kornilov como comandante en jefe, la fuerza combinada de cosacos y voluntarios (unos 6000 hombres en total) iniciaron el ataque a Ekaterinodar, importante núcleo bolchevique y capital de la recientemente creada República Soviética del Cáucaso Norte.

Los bolcheviques disponían de 18000 hombres, con más artillería y ametralladoras, pero Kornilov se negó a retirarse. Llegó a decir: “Si no tomamos ya Ekaterinodar no me queda nada más que hacer que volarme la cabeza”.

La operación comenzó el 10 de abril en un ataque contra fuerzas muy superiores en número. No hizo falta que Kornilov se volara la cabeza: al tercer día de lucha y con los voluntarios reducidos a la mitad un proyectil artillero destruyó la granja que le servía de cuartel general, matándolo en el acto.

Le sucedió el general Denikin, que hizo enterrar su cuerpo en el patio de la iglesia de Elisavetinskaya, tras lo que detuvo el ataque y ordenó la retirada hacia el norte. Cuando los rojos tomaron el lugar, desenterraron el cuerpo, desfilaron por Ekaterinodar exhibiéndolo como un trofeo de guerra y luego lo quemaron en la plaza principal.



Fuentes principales:
“La Revolución Rusa”, de O. Figes.
“La I Guerra Mundial”, de Ediciones Carroggio.
“The Russian Civil War 1918-22”, de D. Bullock.
http://www.firstworldwar.com
http://www.claseshistoria.com
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Re: Lavr Kornilov

Mensaje por Schweijk »

Gracias por arrojar luz sobre este personaje. Algunos de los hechos que mencionas se reflejan en "El Don apacible", de Mijaíl Shólojov, y en "Entre blanco y rojo", de Edwin Erich Dwinger.
"No sé lo que hay que hacer, esto no es una guerra".

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Re: Lavr Kornilov

Mensaje por jlchinchilla »

Schweijk escribió: Algunos de los hechos que mencionas se reflejan en "El Don apacible", de Mijaíl Shólojov, y en "Entre blanco y rojo", de Edwin Erich Dwinger.
El libro de Dwinger lo he leído. Ya colgaré una reseña un día de estos... aunque anticipo que no será muy favorable.
¿Qué mejor manera de morir puede tener un hombre, que la de enfrentarse a su terrible destino defendiendo las cenizas de sus padres y los templos de sus dioses?
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Re: Lavr Kornilov

Mensaje por APV »

La comunicación dentre Kornilov y Kérensky fueron confusas durante el golpe, por la actuación de Lvov, cuando se comunicaron cada uno pensaba que era el otro el que daba el golpe.


La muerte de Kornilov salvó al ejército blanco durante la batalla, porque el pensaba en volver a atacar, lo que era suicida.
Conoce al enemigo y conócete a ti mismo; y en cien batallas no estarás jamás en peligro Sun Tzu.
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Re: Lavr Kornilov

Mensaje por Urogallo »

Interesante semblanza del único "bonapartista" ruso.
"Adoro Alemania. Por eso me gusta que haya dos" Charles de Gaulle.
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Re: Lavr Kornilov

Mensaje por Segoviano »

Muy interesante jlchinchilla :dpm: .

Un Saludo.
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