Tom Clancy. A este lo conocí antes de que se hiciera famoso en las películas, recuerdo que compré La Caza del Ocubre Rojo cuando aún se llamaba La Caza del Submarino Ruso.
Clancy se basa en dos premisas, la descripción minuciosa del uso de armamento avanzado (como el caza invisible, que entonces era conocido como F-19) y que los protagonistas son profesionales (que, por supuesto, lo hacen mucho mejor que los aficionados, en contra de lo que suele suceder en muchas novelas).Frederick Forsyth. Forsyth tiene por norma explicar cómo y por qué pasan las cosas en sus novelas. Si un personaje va a estar en el parque dando de comer a las palomas dedica un capítulo a contarnos su infancia criando palomas, cómo se crían las palomas, cuándo se introdujeron las palomas en ese parque y la mejor marca de granos de maíz para alimentarlas. Debe escribir muy bien porque con todo éso las novelas son muy interesantes.
Larry Bond. Se dio a conocer creando el juego de táctica naval Harpoon, que Clancy usó para los combates de submarinos de La Caza del Octubre Rojo. Luego escribieron a cuatro manos Tormenta Roja. Sus novelas no son tan apasionantes pero sí muy bien documentadas.
Stephen Coonts. Antiguo piloto de A-6 en Vietnam todas sus novelas están centradas en el mismo personaje, también piloto de A-6. Lo más interesante de sus obras son las partes donde describe la vida en un portaaviones.
Ken Follet. Más interesado en las escenas amorosas que en las bélicas se apartó del technothriller para pasarse a las novelas históricas. Probablemente su obra más interesante sea Las Alas del Águila, donde narra la aventura de Ross Perot para rescatar a su personal del Irán de los Ayatolás.
Wilbur Smith. Rodhesiano de nacimiento, casi toda su obra transcurre en el África Británica. Muchas veces retrocediendo a los tiempos en que se establecieron esas colonias. Debo reconocer que es el único de los autores que no he leído.
Clive Cussler. El rey del disparate, escribía novelas como churros adaptando cualquier leyenda por increible que fuese. Recuerdo una donde defendía la teoría de que la guerra de Troya en realidad era la descripción de una guerra entre reinos celtas que transcurría (como no) en Inglaterra. Además, sus héroes son monocordes: Guapos, valientes, que lo mismo pilotan un avión que disparan con una puntería infalible, planchan un huevo y fríen una corbata. Además, se tiran un pedo y huele bien. Eso sí, las novelas son muy divertidas si no te las tomas en serio.
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y mirando información en la base de datos.
pero no os quepa la menor duda que hay otros en la lista muy buenos
¡Pero si incluso literariamente es pésimo!
