La muerte del general Gillespie en el asedio de Kalunga. Artista Jason Askew.
Al comienzo de la guerra anglo-nepalí , encabezó una columna para atacar un fuerte de la colina nepalí en Khalanga, en la batalla de Nalapani , rechazando un contraataque Gurkha . Gillespie luego trató de seguirlos de regreso al fuerte con un grupo desmontado de dragones del 8º . Aunque esto falló, Gillespie renovó el ataque con compañías del 53 ° regimiento de infantería. A treinta yardas del fuerte gritó las palabras, "Un tiro más por el honor de Abajo" y acusó a los hombres cuando un francotirador nepalí le disparó en el corazón y murió a los pocos segundos de caer. Con su muerte, el ataque falló, lo que provocó que el próximo oficial superior llamara a retirada.
Balbhadra y su guarnición de 600 efectivos resistieron con éxito a más de 5.000 soldados británicos durante más de un mes.
Después de dos intentos costosos y fallidos de apoderarse del fuerte mediante ataque directo, los británicos cambiaron su enfoque e intentaron obligar a la guarnición a rendirse cortando el suministro externo de agua del fuerte. Habiendo sufrido tres días de sed, en el último día del sitio, Balbhadra, negándose a rendirse, dirigió a los 70 miembros supervivientes de la guarnición en una carga contra la fuerza sitiadora. Luchando para salir del fuerte, los sobrevivientes escaparon hacia las colinas cercanas. Teniendo en cuenta el tiempo, el esfuerzo y los recursos gastados para capturar el pequeño fuerte, fue una victoria pírrica para los británicos. Varios compromisos posteriores, incluido uno en Jaithak , se desarrollaron de manera similar; pero más que cualquier otra batalla de la guerra, la lucha alrededor de Nalapani estableció la reputación de los Gurkhas como guerreros. Como resultado, más tarde fueron reclutados por los británicos para servir en su ejército.
