Sin ningún encargo oficial, Reddemann comenzó en 1912 a desarrollar las armas en el Departamento de Bomberos de Posen, con la ayuda de otros entusiastas de la idea.
Básicamente, se crearon dos tipos de lanzallamas; el "pesado", que era un arma de defensa de posiciones, era pesado y difícil de mover, tenía un tanque con 100 litros que podían ser proyectados a 45 metros durante 45 segundos a una presión de 15 atmósferas; además, se podían conectar varios tanques juntos y para acercar el arma al enemigo (y disparar "a quemarropa") se construyeron mangueras de 30 metros y se diseñaron túneles camuflados que llegaban hasta la primera línea enemiga. El "ligero" era para ser llevado a la espalda por un solo hombre, aunque este tipo de arma sufrió constantes modificaciones para aligerar el peso que el soldado había de transportar, de manera que los últimos diseños tenían el peso de una mochila ordinaria. Este arma solía llevar unos 10 litros de combustible, lo que producía una salva de 15 segundos a 20 metros.
El 18 de enero de 1915 se formó oficialmente la "Unidad de Lanzallamas Reddemann", con sólo 48 hombres (casi todos antiguos bomberos). Su primera acción fue el 26 de febrero de 1915 en Malaucourt y el éxito elevó la unidad al nivel de compañía, y después en batallón. Por fin, en abril de 1916 todos los lanzallamas se juntaron para formar el "Regimiento de Ingenieros de Guardias de la Reserva", formado por tres batallones, con unos 3000 hombres en total.
Cada compañía del regimiento tenía tres pelotones y cada pelotón cinco escuadras, con dos armas cada una. Cada compañía tenía de 30 a 40 armas ligeras y de 12 a 15 pesadas.
El regimiento tenía una compañía dedicada exclusivamente a la reparación, fabricación y mejoras de las armas.
El éxito del regimiento se ve claramente en el número de acciones de guerra con lanzallamas en las que participó: 15 en 1915, 160 en 1916, 165 en 1917 y 296 en 1918 (casi una diaria). Según el historial de regimiento, el 82 % de los ataques llevados a cabo alcanzaron sus objetivos.
Después de la guerra, el Tratado de Versalles prohibió a Alemania la tenencia de este tipo de armas (artículo 171).
Esta última imagen es interesante especialmente, pues mientras que las anteriores son entrenamientos, ésta es el asalto al Mort-Homme (batalla de Verdún) del 15 de marzo de 1916.
