El ejército cristiano sólo estaba obligado a combatir desde el momento en que atravesó la Sierra, pero no olvidemos que si lo hizo fue por decisión propia, buscando la batalla contra el grueso musulmán. No creo que lo hiciesen sin tener conocimiento, al menos aproximado, de las fuerzas enemigas, y si estas les superasen en una proporción de 2:1 es de suponer que se hubiese tomado otras alternativas (el recuerdo de Alarcos debía estar muy presente). Coincido en que al-Nasir también buscaba la batalla, y no creo que lo hiciese si sus tropas fuesen numéricamente similares a las cristianas, consciente de la superioridad de la caballería pesada de estas últimas. Por ello la proporción de 1,5:1 me resulta muy verosímil, igualaba a priori las posibilidades y por lo tanto ambos tenían motivos para desear la batalla.APV escribió: En realidad el ejército cristiano no tenía demasiadas opciones.
Al comenzar la campaña contraban con el refuerzo de tropas ultramontanas, aunque se da una elevada cifra pudieron ser muchas por ser un momento de gran ánimo cruzado (cátaros, imperio latino, cruzada infantil (no tan infantil),...) o pudieron ser pocas por existir al mismo tiempo muchas opciones donde apuntarse en pos de riquezas. gloria y tierras (Occitania, Oriente,...).
En su marcha al sur las cosas habían ido bien y al atravesar la Sierra Morena no podían dar la vuelta, pues retroceder ante un ejército enemigo por unos pasos montañosos es jugársela, y reconstruir la coalición el año siguiente sería difícil por las preocupaciones propias de cada monarca y las rivalidades.
En ese sentido debían buscar la batalla y pronto para no enfangarse en una guerra de asedio o de desgaste de sus fuerzas.
En realidad era el bando musulmán el que aceptó la batalla cuando tenía muchas opciones en su haber: agotar al enemigo, defenderse en Jaén,... por tanto los musulmanes debían estar confiados en sus fuerzas por lo que debían considerar que tenían amplia superioridad; incluso cerca del 2:1
APV escribió:Por otro lado como he señalado la región de Valencia reunió 11.000 y las Baleares 4.000 así que no sería raro que en Andalucía reclutaran no menos de 10.000 soldados, a los que habría añadir las tropas propiamente almohades y los voluntarios y mercenarios (me extrañaría lo de los árabes aunque no tanto los kurdos porque los había en Cirenaica).
Me resulta un tanto exagerada la cifra de 11.000 peones y 600 caballeros que nos ofrece el cronista de El Puig, no creo que el Rey Zayyan pudiese reunir tales fuerzas. En cualquier caso las “movilizaciones generales” en la Edad Media no tendrían nada que ver con lo que entendemos hoy por ese término. Estoy seguro de que las posibilidades potenciales de Castilla y Aragón superaban en mucho los 12.500 hombres que probablemente acudieron a las Navas de Tolosa, pero también que sólo una parte de los disponibles acudían a la llamada. La lealtad hacia el Rey era una cuestión bastante voluble, el propio Don Diego López de Haro combatió contra Castilla bajo los pendones de Navarra (y después bajo los de León) entre 1201 y 1206, momento en el que se reconcilió (eran más pragmáticos que rencorosos) con Alfonso VIII y regresó nuevamente como Alférez de Castilla. ¿Cuántos nobles no participarían en la batalla por un quítame allá esas pajas?... Y de los que acudieron seguro que ninguno dejó desprotegidas sus posesiones. Respecto a los concejos su prioridad era defender la villa, de modo que no todos los hombres disponibles para el combate participarían en la batalla. Esta era una disposición inteligente, como se demostró tras Alarcos, cuando todas las villas atacadas consiguieron resistir los distintos asedios a las que se vieron sometidas. Sin embargo se perdieron todos los castillos de la Orden de Calatrava, lo que nos hace suponer que las Órdenes Militares sí acudían a los combates con casi todas las fuerzas disponibles. Al menos las peninsulares, porque el Hospitalario castillo de Consuegra fue el único que resistió el ataque almohade posterior a la batalla de Alarcos, aunque su fortaleza también le concedía mejores oportunidades de defensa que los de Malagón, Curiel o Guadalerzas. También podemos suponer que la capacidad de reclutamiento de las Órdenes era elevada, pues sólo tres años después de Alarcos la de Calatrava había reunido 400 caballeros y 600 peones con los que conquistar Salvatierra.
La existencia de tribus de origen árabe en el Magreb está bien documentada, incluso existen nóminas del ejército almohade en las cuales figura el pago a las mismas; por cierto, estaban mucho mejor pagados que un caballero almohade, no digamos ya un infante...
No tengo claro que los mamelucos continuasen siendo esclavos tras convertirse en soldados, pero tampoco tiene mucha importancia porque en cualquier caso la idea está muy alejada de lo que entendemos por esclavos en la actualidad. Como ya dije coincido en que existen probabilidades de que un cuerpo de negros combatiese en el palenque, aunque son sólo suposiciones al no existir crónicas contemporáneas que avalen su existencia.APV escribió:Los mamelucos seguían siendo formalmente esclavos aunque constituyeran una casta militar, su propio nombre significa poseidos. También existían los ghilman.
Así pues no era nada raro considerar que tuvieran soldados-esclavos negros como parte de la guardía califal; aunque quizás su número se exagere al confundir los cronistas éstos con los imesebelen al encontrarse ambos en el palenque y asociarlos.
.Fernando Martín escribió:La aportación de navarra parece más una embajada que un refuerzo
Otra vez el problema de las cifras… Los 200 caballeros que indican las crónicas parece un número muy reducido, aunque quizá olvidasen indicar los peones que podrían acompañarles… Lo que sí es seguro es que la partida del Rey Navarro tuvo que ser muy precipitada, pues no tenía intención de acudir a la campaña hasta que, a primeros de Junio, el Obispo de Narbona pasó por Pamplona camino de Toledo, amonestando de tal forma a Sancho VII que a este no le quedó otra que cambiar de idea…
Saludos.