Bernardo O’Higgins
Dos grandes frases celebres:
…“Mi misión americana ha concluido. Ahora soy sólo ciudadano”.
…“Monte a caballo el que pueda. ¡Nos abriremos paso a través del enemigo!”.
Fuentes Bibliográficas:
• Bernardo O ` Higgins. El Estado De Chile Y El Poder Naval, En La Independencia De Los Países Del Sur De América. Renato Valenzuela Ugarte - 1999 - Chile
• Vida del jeneral don Bernardo O'Higgins. Su dictadura. Su ostracismo. Por Miguel Luis Amunátegui y B. Vicuña Mackenna. Miguel Luis Amunategui. R. Jover, 1882
• El Ostracismo de los Carreras, los Generales El ostracismo de los Carreras: Los jenerales José Miguel i Juan José i el coronel Luis Carrera. Benjamín Vicuña Mackenna, 1837.
• 100 Masones Su palabra - Antonio Franco Crespo. Ecuador 2010
• Historia del libertador, don José de San Martín, Volumen 2. Editorial Sopena Argentina. 1949.
Sitios Web:
http://html.rincondelvago.com/bernardo-ohiggins.html
http://www.auroradechile.cl/newtenberg/ ... -2965.html
http://www.memoriachilena.cl/602/w3-article-562.html
http://www.biografiasyvidas.com/biograf ... rnardo.htm
Gran militar, que nació en Chillán, Chile, aunque hay fuentes que se aseguran que fue en Pemuco (mas que unos 50 kilómetros de diferencia entre un punto y otro), un 20 de agosto de 1778. Era hijo natural del Virrey del Perú Ambrosio O’Higgins, un duro irlandés que además ostentaba el rango de Coronel de Dragones de la Frontera, como así también Maestre de Campo General en Chile. Por lo tanto este se procuró de inmediato por la educación de su hijo y lo envió a instruirse a Lima, Perú.
Virrey del Perú, Ambrosio O’Higgins
Posteriormente, ya en 1782, Don Ambrosio fue ascendido a brigadier general. Y más tarde a ordena que Bernardo sea llevado a la exclusiva Academia Richmond, en Inglaterra, donde uno de sus maestros fue Fransisco Miranda, quien le inculcó las primeras ideas políticas de índole inpendentistas y lo inició en la masonería (instititución filosofica, filantropica y progreista, en este caso llamada como “la logia”, que tenía fines revolucionarios e independentistas). En 1788, Ambrosio era designado gobernador de Chile y a pesar de que su padre le enviaba dinero para su manutención, sus tutores lo obligaban a vivir de la caridad, practicamente en la pobreza. Póstumamente en el mes de marzo de 1799 recibe la orden de tomar destino hacia Cádiz por directiva de su padre, donde se incorporaría al ejército español con el rango de teniente, y antes de su marcha Miranda le entrega instrucciones para la “Gran Reunión Americana de Cádiz” (organización con objetivos independentistas americanos), la cual malogra lo requerido por el virrey Chileno para con su hijo. Ya adentrados en abril del mismo año y con otras ideas, trata de volver hacia Chillán desde los puertos de Portugal, pero le fue en vano el intento debido a que los puertos españoles estaban en pleno bloqueo de los ingleses, por lo tanto pasó un mes en Lisboa, donde Don Nicolás de la Cruz trató de hacer efectiva la incorporación de Bernardo como teniente del ejercito español, pero acción que se ve frustrada ya que al hombre que buscaba era a Bernardo Riquelme (información importante a aclarar, este era el nombre real de nuestro personaje en cuestión, era distinguido de esta manera por los españoles, y el apellido se refiere a sangre materna, a doña María Isabel Riquelme y Meza, una chilena hija de agricultores), pero este se bautizó en con el nombre con el que lo conocemos, y fue así que se llamó Bernardo O’Higgins.
Bernardo O’Higgins de joven
Mas tarde sin dinero y haraposo vuelve a España, a asumir como agente de Francisco de Miranda, pero su padre se vio enterado de ello y decide que lo despojen de la vivienda donde residía, casualmente esta era la casa de Nicolás de la Cruz quien trataba de conciliar hasta que finalmente consigue dar con Bernardo, y desobedece las ordenes del virrey y otorga a Bernardo O’Higgins una suma de dinero que le serviría para volver a su patria. Por eso, sin dudarlo solicitó volver a su cuna, a Chile, pero tragicamente el barco español en el que viajaba fue capturado por los ingleses (recordemos que en aquel momento era en el cual España se encontraba en guerra con Inglaterra) y, O’Higgins fue despojado de sus pertenencias pero se escapa y en el año 1800 vuelve a Cádiz a la morada de Don Nicolás, pero allí ya asediaba la peste de la fiebre amarilla, y Bernardo O’Higgins se salva de milagro ya que había contraído la mencionada enfermedad. Un año después, a mediados de marzo fallece su padre, el Virrey de Perú, don Ambrosio O’Higgins, quien había hecho un testamento, donde dejaba a su hijo la hacienda San José de Las Canteras con dimensiones de unas veinte mil (20.000) hectáreas y tres mil (3.000) cabezas de ganado vacuno. Entonces consiguió gracias a la ayuda económica de sus amigos mas cercanos, logró recuperarse levemente hasta que en arribó en Valparaiso en el año 1802. Una vez que Bernardo O’Higgins se instaló como hacendado, logró trabar muy buena amistad con otros revolucionarios y masones chilenos. En 1808 cuando ya era noticia la captura de Carlos IV de España y su hijo Fernando VII, O’Higgins integraba en Concepción el grupo denominado “Duendes Patriotas” y además era designado como subdelegado de La Laja, puestos que más tarde le valieron para crear a fines de 1810 el Regimiento Nº 2 de Caballería de la Isla de La Laja y seguidamente el primer ejercito nacional de Chile.
Bernardo como Subdelegado
Oleos de Gil Castro
En 1811, año en el que ya habían empezado los enfrentamientos con los realistas, O’Higgins ya se estaba involucrando, y en febrero fue nombrado teniente coronel del 2º Regimiento de Caballería de Milicias de La Laja (conocidos después como “Lanceros de la Frontera”). A esto, enfurecido el actual Virrey de del Perú Fernando de Abascal envía a Chile al brigadier Antonio Pareja para detener la sublevación e intentos de emancipación con una fuerza de camino fue sumando números llegando a tener unos cuatro mil (4.000) hombres los que detuvieron todos los intentos de los insurgentes acaparando el orden, pero en Talca, a donde se había escabullido Bernardo, el que se ve obligado a disolver al Regimiento de Lanceros de la Frontera por el ataque de los realistas, y se enroló en el ejercito patriota al mando de Carrera con el que enfrenta a las fuerzas de Pareja, quien ya estaba enfermo y rápidamente muere a fines de mayo. Con los realistas derrotados, se instaura el orden y el rearme del ejército. Precisamente en octubre de 1813 se reunirían los hombres de Carrera con los de Bernardo a cercanías del vado El Roble situado a orillas del río Itata, donde O’Higgins recomienda trasladarse a una mejor posición ya que había un puesto realista con el poderío de un cañón que estaba situada para defender el vado El Roble, pero tal idea fue rechazada. Por cual a día siguiente los realistas realizaron un ataque sorpresa flanqueando a los patriotas mientras además el puesto del cañón también los atosigaba y la confusión y desbandaba tomo parte muy rápidamente. Con ello Carrera huyó a nado el río hasta el otro lado estando a salvo ve a sus hombres como estaban por ser apabullados y aniquilados, pero surge entre la nada la valentía de Bernardo O’Higgins quien empuñaba un fusil y a viva voz brinda un grito de guerra: “¡O vivir con honor o morir con gloria; el que sea valiente, sígame!” por lo que ordenó a todos que carguen sus bayonetas y sin pestañear los soldados lo obedecieron, con esto consiguió rearmar la división y alcanzar una victoria épica. O’Higgins se destacó impresionantemente casi desprestigiando la tarea de Carrera, quien era terco e impetuoso. Lo que haría designar a Bernardo como General en Jefe del Ejercito Restaurador, haciendo así un reemplazo dúctil de José Miguel Carrera.
Quiero hacer cita textual: “…toma el fusil del muerto y, con gesto homérico, apunta y dice: ¡A mí, muchachos! ¡O vivir con honor o morir con gloria! ¡El que sea valiente, que me siga! La tropa, alentada por su caudillo, movida por un resorte eléctrico…” -fragmento de la obra O’Higgins, Ciudadano de América, Luís Palma Zuñiga, Chile. Editorial Universitaria, 1956 - 340 páginas
Combate de El Roble
Después de varias intentonas de los realistas de retomar el poder, entre guerrillas y otras, fue así que posteriormente que los dos primeros días del mes de octubre de 1814 se desarrolló la batalla de Rancagua, disputada entre los patriotas bajo las ordenes del general Bernardo O'Higgins contra las fuerzas del ejercito realista comandadas por Mariano Osorio, quien había sido enviado desde el Perú para brindar refuerzo a las lineas de Gabino Gaínza. Anteriormente, O’Higgins solicitaba ayuda a Carrera en reiteradas ocaciones ya que el contrincante, que poseía superiores fuerzas, avanzaba sobre el río Cachapoal. Para entonces el a fines de septiembre, Carrera llega a Rancagua, donde se alineó con O’Higgins quien impartió el plan de atrincherarse en la plaza y una division al mando de José Miguel Carrera situada a cercanias de la plaza de Rancangua. Corría la suerte y en desventaja par el ejército patriota atrincherado con la suma de unos 2.200 hombres aproximadamente contra unos 5.000 del realista, que el 1 de octubre de 1814 se inician las hostilidades, momento en el que los patriotas detubieron ataques de las fuerzas realistas, dado que al siguiente día Miguel Carrera es solicitado, quien se ecnontraba en las afueras con la caballería que contaba con 900 hombres., de todas maneras, resulto en derrota patriotica tras mas de 30 horas de combate ya que a O’Higgins le enfurecia la idea de rendirse. Este por lo tanto ante seguidillas de ataques dio la orden para que se replieguen hacia Cañada, donde más de la mitad sobrevivió pero luego serian tomados prisioneros.
Carga de O’Higgins en la Batalla de Rancagua
Continua...
, ¿se entiende no?). Por lo demás encantado que te hayas enganchado jmunrev, púes me pareció exorbitante que nadie se animó a escribir sobre tal personaje, es más vengo haciendo hace bastante tiempo, a ver si se enrolan los vecinos chilenos, de manera tal que intente contactar a Diti pero quien sabe por donde andará. También es como dices que estan desplegados, pero al momento del ataque su ubicación siempre termina por ser de forma espectante, esperan atrincherados. Hasta traté de recrear que hayan hecho un movimiento, pero tanto no es así (tengo otro trabajo mas extenso pura y exclusivamente sobre la Batalla de Chacabuco, se vendrá artículo 
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