La historia del buque comienza cuando Gran Bretaña solicitó a sus dominios que contribuyesen al esfuerzo de la Royal Navy por mantener su supremacía respecto a la Kaiserliche Marine. Nueva Zelanda recoge el guante y solicita un préstamo (que no fue terminado de pagar hasta 1945) para construir un crucero de batalla que llevase el nombre del país.

En 1910 se eligió construir un buque de la clase Indefatigable, pese a que los cruceros de batalla germanos que se estaban construyendo o planificando por entonces eran superiores, si no en armamento, sí en compartimentación y blindaje. Características principales: 18.500 t, 25 nudos, armado con ocho piezas de 305 mm y 16 de 101 mm, con una cintura acorazada que alcanzaba un máximo de 152 mm.

 

 

El HMS New Zealand es comisionado en 1912, iniciando una gira en la que se calcula que casi la mitad de la población del país visitó el barco. Aunque estaba previsto que actuaría en el Pacífico, en 1913 es asignado a la Grand Fleet, como buque insignia de la 2ª Escuadra de cruceros de batalla. Al estallar la guerra participa en la fuerza de cobertura durante la primera batalla de la Bahía de Heligoland, y en Enero de 1915 activamente en la batalla de Dogger Bank, donde sus cañones contribuyen al hundimiento del SMS Blucher.

En Abril de 1916, y debido a la niebla, sufre una importante colisión con su gemelo HMS Australia, pero mientras el segundo necesita varios meses de reparaciones, el HMS New Zealand es reparado el 30 de Mayo, un día antes de la batalla de Jutlandia. Durante el enfrentamiento con sus contrapartes germanos durante la carrera hacia el sur, es el quinto buque de la línea británica, pudiendo disparar tranquilamente sobre el SMS Moltke ya que este dispara sobre el HMS Tiger y el último buque de la línea alemana, el SMS Von der Tann, se "salta" al HMS New Zealand para disparar sobre el último buque británico, el HMS Indefatigable. Cuando este último vuela por los aires, el SMS Von der Tann, cambia de blanco hacia el New Zealand, que mientras tanto no había conseguido ningún blanco sobre el SMS Moltke.

Entonces resulta alcanzado por un proyectil de 28 cm disparado por el SMS Von der Tann, pero el escudo de la torre X resiste el impacto, que por lo demás no causa ninguna baja. Pronto la efectividad del crucero de batalla germano disminuirá mucho, pues la llegada de los acorazados de la 5ª Escuadra le obliga a salirse continuamente de la línea para poder descentrarse, perdiendo de este modo la puntería. Tras la aparición del grueso del la Hochseeflotte y el cambio de rumbo hacia el norte, el HMS New Zealand es ahorquillado por los disparos del acorazado SMS Prinzregent Luitpold, pero sin resultar alcanzado. Durante los combates que se desarrollaron a última hora de la tarde entre los buques de Beatty y los maltrechos cruceros de batalla de Hipper, el HMS New Zealand alcanzó con tres impactos al SMS Seydlitz y con uno al pre-dreadnought Schleswig-Holstein, de la II Escuadra, que se había acercado en apoyo de los castigados cruceros de batalla germanos.

El HMS New Zealand fue el buque de ambos bandos que más disparos de gran calibre efectuó, con un total de 407, aunque sólo pudo acreditar los cuatro que hemos narrado. Como contrapunto, sólo recibió un impacto, siendo el único buque de Beatty que no fue hundido o sufrió importantes bajas y averías. La tripulación achacó la suerte del barco a la falda y colgante maorí que su Capitán siempre llevaba en combate. Tras Jutlandia, el HMS New Zealand participó en la segunda batalla de Heligoland como fuerza de cobertura, aunque sin llegar a disparar. Tras el fin del conflicto inició una nueva gira por el Pacífico, siendo visitado por un tercio de la población de Nueva Zelanda. Finalmente el buque fue dado de baja y desguazado en 1922.