Cómo la decisiva persecución nacional a los petroleros de la CAMPSA dejó a la República sin combustible

Se crea la CAMPSA

El 28 de junio de 1927, un Real Decreto de Alfonso XIII, auspiciado por el ministro de Hacienda José Calvo Sotelo, bajo el gobierno del General Primo de Rivera, creaba el Monopolio de Petróleos. Unos meses más tarde, previo concurso, el Monopolio se adjudicó a un consorcio de diversas entidades bancarias que constituyeron la "Compañía Arrendataria del Monopolio de Petróleos" (CAMPSA) organizando una flota propia mediante la adquisición de todos los petroleros españoles, puesto que así le obligaba la concesión estatal.

La naviera recién creada, necesitaba con urgencia de petroleros, por lo que tuvo que recurrir a la compra todos aquellos que navegaban bajo pabellón español (sólo el Gobeo, perteneciente a la Compañía Cantábrica de Navegación, quedó fuera de CAMPSA, aunque también estuvo fletado hasta fecha tan tardía como los años 60). Más adelante comenzó a construir sus primeras unidades (ver tabla), de acuerdo con las necesidades del momento.

La nueva naviera adquirió a la Compañía Vasco-Valenciana de Bilbao los Ebros, Eduardo y Ophir y algo más tarde el Tiflis. Procedentes de la Sociedad Comercial de Oriente y la Tabacalera de Filipinas, se integraron el Conde de Churruca (rebautizado Remedios) y los Elcano y Arnús (que pasó a llamarse Badalona). El Artza-Mendi se incorporó a CAMPSA con el nombre de Zorroza para servicios auxiliares. También se construyó El León de 400 toneladas. De menor tamaño era el Petrolea, que solía utilizarse para suministrar combustible a los pesqueros del Cantábrico y calificado como “curiosísimo chisme, con proa de violín”. Ya en 1931, CAMPSA encargó la construcción de dos petroleros de 10.900 toneladas de peso muerto y 144 metros de eslora, que fueron bautizados con los nombres de Campoamor y Campeador en los astilleros de Euskalduna, ambos construidos con licencia del sistema Isherwood (un sistema de construcción naval longitudinal que mejoraba entre otras cosas la capacidad de carga).

A partir de ese momento todos los barcos construidos por CAMPSA, encabezaron su nombre con las letras iniciales del monopolio (salvo el José Calvo Sotelo que llevó el nombre del fundador), siendo CAMPSA durante algunos años la única naviera que dispuso de buques-tanque para el transporte de petróleo.

Los petroleros de mayor tonelaje de la flota de CAMPSA eran el Campoamor y Campeador (construidos por Euskalduna, de 10.600 toneladas de peso muerto); tenían casi 8.000 toneladas de arqueo cada uno y ambos permanecieron del lado de la República.

Los otros grandes petroleros de CAMPSA, de más de 6.000 toneladas de arqueo eran el Campomanes, Campuzano, Campeche y Campero; el Elcano superaba ligeramente la 5.000, el Remedios (ex Conde de Churruca) y Zorroza (ex Artza-Mendi) superaban las 4.000. Los 7 permanecieron con la República y fueron destinados al transporte de combustibles en el Mediterráneo y Mar Negro. La mayoría de los petroleros pequeños, como el Campalans, Camprodón, Campilo (ex alemán Guadalhorce) o el pequeño Petrolea (ex alemán Petrolus), también estuvieron en manos de la República.

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Vista aérea del Campuzano

La situación de la flota petrolera al comienzo de la Guerra Civil

En 1936 la CAMPSA contaba con 11 buques-tanque de altura, 6 buques-tanque auxiliares, 3 pontones y 1 buque en construcción (el segundo Campilo, ya que el primero se vendió a la Armada) sumando un total de 110.980 toneladas de peso muerto. Excepto el Campas y el Badalona y los 3 pontones, el resto de buques quedó en la zona roja.

El puerto de Santa Cruz de Tenerife pasó a tener una importancia enorme. Recibía los crudos de Texaco -cuyo apoyo fue esencial- y desde él, con petroleros españoles o de la propia Texaco, los productos refinados llegaban a la península. En un principio los nacionales sólo contaron con tres puertos donde poder descargar: La Coruña, Palma de Mallorca y Vigo.

Cómo el hundimiento del Komsomol afectó al transporte de mercancias para la República

Resultó que el Alto Tribunal de Presas publicó «listas negras» de buques y navieras que negociaban con el gobierno republicano. El impacto fue notable. Incluso «varias compañías aseguraron que sus barcos no tocarían puertos españoles que no estuvieran bajo la jurisdicción del general Franco».

El golpe casi decisivo desde un punto de vista económico, fue el hundimiento del buque soviético Komsomol el 14 de diciembre de 1936. Se decidió bajo la exclusiva responsabilidad del almirante Francisco Moreno, de forma que «en lo sucesivo, los rusos se limitarían a recalar en Marsella y esto con muy poca frecuencia».

La historia del Komsomol es de sobras conocida: buque unas 6.700 toneladas, registrado en Odessa, al mando del capitán Mezentsev, con una tripulación escogida de miembros de la Juventud Comunista, partió desde Poti, en el Mar Negro, a Gante (Bélgica) con una carga de manganeso, pero de hecho, llevaba material de guerra para la República (lo mismo puede decirse de sus dos anteriores viajes a Cartagena en octubre y noviembre). El 15 de octubre de 1936 llevó la primera gran remesa de material, los carros del coronel Krivoshein. En el curso de su tercer viaje, fue interceptado por el Canarias, el 14 de diciembre, casi por casualidad, pues los barcos "acompañantes" que debían haberlo guiado a puerto seguro no detectaron la presencia del crucero nacional. Francisco Moreno escribe que se temía un posible ataque de una escolta de submarinos rusos y por eso el Canarias perdió el menor tiempo posible recogiendo a la dotación de 34 hombres y 2 mujeres antes de hundirlo, sin inspeccionar siquiera el cargamento. Las versiones de su pérdida mencionan los 56 cañonazos del Canarias o que su tripulación prendió fuego, abriendo las escotillas para impedir el descubrimiento de las armas transportadas. El almirante soviétivo Kuznetsov ni siquiera menciona el incidente. Los tripulantes, llevados al penal de Málaga, quedaron incomunicados. Al menos 7 barcos rusos fueron declarados "buena presa" por los nacionales y rebautizados en la serie de los "Castillos".

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El Komsomol visto desde el Canarias

Hasta el hundimiento del Komsomol, la "Sovietflot" participó en el transporte de combustibles destinados a la República Española. El primer petrolero soviético que transportó combustibles fue el Cergo en septiembre de 1936, le siguieron el Sakalin, Soviets Kaya Neft, Avranesovf, Emba... En conjunto, pasaron de transportar poco menos de 20.000 toneladas de combustibles soviéticos en septiembre a más de 43.000 en noviembre, pero dejaron de hacerlo después de diciembre de 1936.

El transporte de crudo recae en la CAMPSA

A partir de enero de 1937, el esfuerzo de la flota de petroleros republicanos se intensificó. El Gobierno republicano desplazó a los puertos soviéticos del mar Negro a los buques tanque Campomanes, Campeador, Elcano y el pequeño A. Satrustegui para sumarlos a la flota que había efectuado los viajes anteriores compuesta por los buques tanque Remedios, Zorroza, Campeche y Campero. Estos buques continuaron el suministro de combustibles procedentes de la URSS que hasta ese momento habían efectuado los petroleros soviéticos. Los mayores transportes fueron en enero y marzo de 1937 con 36.346 toneladas y 46.771 respectivamente; sin embargo, a partir de abril, fueron perdiendo importancia. En abril, sólo se registró un viaje del Campeche y, en mayo, uno del Remedios y otro del Campomanes.

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La República pierde sus dos mayores petroleros

El Campoamor acababa de llegar a Bilbao procedente de Port Arthur (EE.UU.) con un cargamento de gasolina cuando se produjo la sublevación militar. Al encontrarse con el acorazado España, entró precipitadamente en Santander a primeros de agosto, donde estuvo bloqueado hasta el 20 de diciembre de 1936. En enero de 1937, cargó combustibles en Filadelfia y, en abril en Galveston, con destino a Santander en ambas ocasiones.

Se le instaló un aparato de radiotelegrafía de onda corta, una novedad en buques de este tipo, para intentar comunicarse con una emisora republicana en Valencia, pero el radiotelegrafista tuvo más dificultades con la onda corta que con la larga, siendo incapaz de establecer comunicación y no advirtiéndosele de que había comenzado la ofensiva nacional hacia Bilbao. Durante el trayecto el buque se repintó en la mar y se le puso el falso nombre de Pollux, matrícula de Londres.

El Campoamor, sometido a una vigilancia estrecha de los servicios de espionaje franquistas en ambos viajes, se encontraba a las diez de la noche del 5 de mayo de 1937, navegando, con las luces apagadas, a 10 millas de Santander. El mercante armado en corso Ciudad de Valencia (1), le ordenó parar y al no obedecer le disparó dos cañonazos de aviso. El Campoamor detuvo sus máquinas y durante más de una hora el Ciudad de Valencia estuvo dando vueltas a su alrededor. Al fin el Ciudad de Valencia ordenó "Campoamor proa al Norte o disparo", disponiéndose la tripulación a echar a pique la nave, entonces, sorprendentemente, el crucero auxiliar, mediante señales luminosas les indicó "All clear for you" y se retiró ante la incertidumbre de sus tripulantes!!

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El Ciudad de Valencia

El Campoamor apresado por un comando

Desde allí el Campoamor marchó a refugiarse en la rada de Le Verdon, cerca de la desembocadura del Gironda. Allí lo abordó un comando franquista compuesto por 6 falangistas a las órdenes del comandante de caballería Julián Troncoso, que con el respaldo de su capitán y de una parte de la tripulación, lo condujeron el 6 de julio al Puerto de Pasajes, donde arribó el día 7 escoltado por dos pesqueros armados nacionales (la respuesta del Gobierno fue ordenar de saliera de Santander un submarino con orden de hundirlo), quedando varado como consecuencia de su enorme calado y de su elevada carga. Su captura fue vital para abastecer de combustible a los aviones franquistas en la campaña del Norte. Puesto a flote, se sumó a los petroleros de la CAMPSA de Burgos el 27 de julio de 1937. La Comandancia Militar de Irún organizó un dispositivo para su captura. Y en los archivos de CAMPSA se custodiaban las informaciones de los espías sobre sus viajes.

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El Campoamor en navegación

El Campeador víctima de la marina italiana

El Campeador regresaba de Port Arthur cuando se produjo la rebelión y se refugió en Casablanca hasta que pudo cruzar el estrecho de Gibraltar en octubre cuando regresaba la flota del Cantábrico y transportó combustibles soviéticos desde Batoum a partir del 23 de enero de 1937. El Campeador fue sometido igualmente a vigilancia durante sus viajes por el Mediterráneo (2) y, el 12 de agosto de 1937, fue cañoneado por el destructor italiano Saetta (3) al norte de Kenitra cuando navegaba rumbo a Barcelona procedente de Constanza, cargando 9.516 toneladas de gasolina. Se hundió inmediatamente. El Gobierno de la República se quedó así sin sus dos mayores petroleros.

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Noticia del hundimiento del Campeador publicada en la edición del diario ABC de fecha 18 de agosto de 1937

Sin tregua: Bombardeados, torpedeados o apresados

Todos estos buques sufrieron vicisitudes de lo más variopintas, corriendo diferentes destinos y acabando varios de ellos en manos de la marina nacional:

El Campomames fue hundido en Valencia durante la Guerra Civil por la aviación pero fue reflotado posteriormente. Durante la Segunda Guerra Mundial fue torpedeado el 25 de diciembre de 1942 por el submarino norteamericano (4) USS Barb en la costa de Portugal y abandonado, pero fue recuperado por unos pesqueros que lo remolcaron a Ferrol, donde se reparó.

El Campeche chocó cerca de Barcelona con una mina, pero logró llegar a Barcelona donde de nuevo fue alcanzado, esta vez por bombas de la aviación. Logró escapar de nuevo y se refugió en Marsella hasta el final de la guerra en abril de 1939.

El Campero tuvo muchos incidentes durante la Guerra Civil, entre ellos fue atacado y averiado el 30 de mayo de 1937 por el sumergible General Sanjurjo (ex italiano Archimede) y alcanzado por la explosión de un barco utilizado como polvorín (5), pero logró sobrevivir y refugiarse en Marsella hasta el final de la guerra.

El Camprodon fue hundido en Valencia en 1938, fue reflotado y acabó sus días en 1968 desguazado.

El Campuzano fue capturado sin escolta de ningún tipo en el golfo de Lyon por los cruceros Canarias y Almirante Cervera el 8 de enero de 1937. Transportaba 7.500 toneladas de gasoil rumbo a Barcelona embarcado el 7 de octubre de 1936 en el puerto de Saint Louis.

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El Campuzano

El pequeño Petrolea fue apresado en Málaga en febrero de 1937.

El petrolero Elcano navegó como buque-tanque militarizado al servicio de la flota republicana, cargando combustible en dos ocasiones en Batoum, en el mar Negro. En julio de 1937 con un cargamento completo de combustible, algunas cajas de munición y un avión desmontado, se dirigió a Santander, cruzando el Estrecho de Gibraltar disfrazado de buque británico. Su capitán decidió entrar en Gijón, aprovechando un día de mal tiempo. Desde finales de agosto de 1937, la aviación nacional atacó los puertos de Gijón y Avilés, quedando el buque inutilizado el 28 de agosto de 1937. El 20 de octubre de 1937, el Elcano fue alcanzado en el puerto de El Musel (Gijón) en un bombardeo especialmente intenso, originando el incendio del buque. Las autoridades, viendo un peligro para los demás buques, decidieron remolcarlo fuera del puerto y encallarlo en la costa. En la madrugada del 22 de octubre las tropas nacionales ocuparon El Musel. Su salvamento fue especialmente difícil, lográndose en octubre de 1938, pero viendo imposible su recuperación, sus restos se sacaron a subasta pública.

Buques británicos y rusos transportan crudo para la República

Los servicios de espionaje desplegados por los franquistas para conocer los movimientos y cargas de los petroleros de la CAMPSA republicana fueron más importantes que los destinados a conocer los embarques y destino del armamento comprado por la Comisión de Compras de París para la República en buques extranjeros. Los éxitos de sus misiones eran muy evidentes a mediados de agosto de 1937, porque la flota de petroleros de la CAMPSA republicana ya estaba muy mermada y el transporte de crudos pasó a depender cada vez más de los petroleros de pabellón extranjero no soviético.

Los petroleros de pabellón británico Esturia, Arletta, Stanmount, Gloxinia y Stanbridge transportaron una media de 15.000 a 20.000 toneladas de combustibles mensualmente desde los puertos soviéticos del mar Negro. Otros buques británicos y de pabellón griego también transportaron petróleo ocasionalmente, pero los más regulares fueron los petroleros británicos citados. Los petroleros de pabellón británico monopolizaban entonces el transporte de crudos mientras que, entre agosto de 1936 y junio de 1937, los petroleros españoles y soviéticos habían sido quienes transportaron los combustibles soviéticos con destino a la República Española, aunque los soviéticos sólo hasta diciembre de 1936 como consecuencia de los ataques a la flota soviética. El ataque más emblemático de todos fue el hundimiento del Komsomol por el crucero Canarias.

Los últimos viajes documentados de carburante soviético enviado a España fueron los embarcados en los meses de agosto y octubre de 1938 en los petroleros Arletta y Stanmount. Ambos petroleros efectuaron un total de cuatro viajes con una media de 6.500 toneladas de combustibles por viaje.

Los buques británicos de la patrulla de Nyon también protegieron el transporte de petróleo con destino a la República Española embarcado en otros puertos, entre los que destacó el puerto rumano de Constanza. El embarque de petróleo en este puerto se prolongó hasta febrero de 1939. El petrolero Refast embarcó los tres últimos cargamentos procedentes de Constanza con destino a Valencia el 12 de diciembre de 1938, el 12 de enero y el 1 de febrero de 1939 respectivamente. En cada una de las tres ocasiones fueron embarcadas más de 6.000 toneladas. Los petroleros más habituales que participaron en el tráfico de Constanza desde finales de 1937 fueron el Arlon, Stanfield, Rigny y Maryad.

El Arlon británico al servicio de la República

El gran petrolero británico Arlon (4.903 GRT) fue hundido en el puerto de Valencia durante un bombardeo el 27 de junio de 1938. Era propiedad de la Arlan SS. Co. y había efectuado 10 viajes de carburantes para la República Española. El viaje de junio de 1938 era el número 11. En cada uno de sus diez viajes anteriores transportó una media de 6.700 toneladas de combustibles por viaje, la mayoría procedentes del puerto de Constanza. Inició el transporte de carburantes para la República el 21 de julio de 1937, en que cargó 6.696 toneladas de combustibles en Londres con destino a Gijón. De allí, pasó al Mediterráneo y embarcó nuevamente combustibles en el puerto de Constanza el 31 de agosto, 29 de septiembre, 27 de octubre y 18 de noviembre de 1937 respectivamente. El primero fue suministrado por la empresa Continental y los siguientes, por Raffinage. Durante uno de los trayectos, su tripulación fue testigo del combate de Cherchel del 7 de septiembre de 1937 y el capitán del petrolero entregó al almirante británico Somerville un informe sobre lo sucedido en aquel combate.

Los servicios de espionaje franquistas empezaron a recoger información sobre los viajes del petrolero Arlon gracias a los informes que les suministró William W. Brewster desde París, que era el representante de Texaco ante el Gobierno de Burgos. Brewster envió sendos informes fechados el 19 de octubre y 19 de noviembre de 1937 a la CAMPSA de Burgos en los que informaba sobre el combustible embarcado por el Arlon el 27 de octubre en Constanza con destino a algún puerto de la República Española -no se especifica cuál en el informe. Con fecha 17 de diciembre, también informó sobre el combustible embarcado en el mismo puerto del mar Negro por el Arlon el 18 de noviembre de 1937. Brewster no pudo informar sobre el viaje embarcado en Saint Louis el 11 de diciembre de 1937; pero sí que informó sobre el que salió de Constanza nuevamente el 30 de diciembre de 1937. El seguimiento del petrolero por los servicios de información continuó durante los siguientes viajes emprendidos en Constanza, es decir, los embarcados el 19 de febrero y 16 de marzo de 1938. El Arlon volvió a cargar combustibles en Constanza con destino al puerto de Alicante el 2 de abril de 1938. Finalmente, fue hundido el día 27 de julio de 1938 durante un bombardeo del puerto de Valencia; transportaba 6.700 toneladas de combustibles comprados a la Nafta Rusa.

Para cubrir las bajas de la flota producidas por la Guerra Civil CAMPSA compró en 1937 tres petroleros ingleses que recibieron bandera de conveniencia. Uno de ellos, el English Tanker (ex Oilfield) fue hundido el 6 de junio de 1938 por la aviación nacional en Alicante. En 1939 fue reflotado después de descargar la gasolina restante en sus tanques. Cambió su nombre a Castillo Almenara, volviendo a navegar para la Campsa como Camposines.

Visicitudes de la Flota de petroleros roja

Como hemos ido viendo en el texto, la suerte y destino de los petroleros fue de los más variada:

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La flota petrolera nacional

Al comienzo de la Guerra Civil, el bando nacional controlaba «tan sólo el 15% del tonelaje mercante español...» al finalizar 1937, entre capturas y entregas voluntarias, «los nacionales habían recuperado el 50% del tonelaje existente al comienzo de la guerra», aparte de las capturas, sobre todo de buques soviéticos y griegos, que fueron declaradas «buenas presas» y que engrosaron la marina mercante española en la serie inicial de los «Castillos» que, después, dieron origen a la Empresa Nacional Elcano.

Uno de los temas que causó mayores preocupaciones al Gobierno de Burgos fue el de los petroleros, porque la República controló, en un principio, casi todos los grandes petroleros de CAMPSA de más de 3.000 toneladas; excepto los petroleros Campas y Badalona, y los pontones Ebros, Tiflis y Texaco, que se encontraban en zona nacional.

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El Badalona

El Campas, buque tanque de más de 6.000 toneladas de arqueo, quedó bloqueado en la entrada del río Guadalquivir en julio de 1936 para impedir el acceso a Sevilla. Reflotado y puesto de nuevo en servicio en octubre de 1936, pasó a manos de los sublevados, desempeñando una labor frenética hasta el fin de la contienda. La falta de instalaciones de almacenaje de crudo en el territorio rebelde y la necesidad de surtir de combustible a los buques nacionales que actuaban desde puertos italianos llevó a que el petrolero nacionalista Campas trasladase a los depósitos de la Regia Marina en Cagliari e isla Maddalena un cargamento de petróleo en agosto de 1938. En abril de 1939 quedaban todavía varios miles de toneladas de petróleo de CAMPSA almacenados en puertos italianos.

El Badalona(ex Arnus), de más de 4.000 toneladas, llegó a La Coruña en julio de 1936 y empezó a navegar con pabellón alemán temporalmente como Sirius para evitar problemas internacionales; y el Ebros, de más de 3.000 toneladas, que prestó servicio en Palma de Mallorca fundamentalmente. El Ophir fue apresado en Málaga en febrero de 1937 al rendirse la ciudad, prestando servicio durante varios meses de 1938 abasteciendo al Ejército de Levante desde Palma de Mallorca a Vinaroz, navegando de noche y sin escolta.

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El Badalona

Italia prestó a los nacionales 6 buques tanque, petroleros y aljibes, para el puerto de Palma. Se trató del buque aljibe Teodolina, del petrolero Consolata (ex Persiano) y la lancha petrolera GR 154, que fueron entregados en febrero de 1937 e izaron bandera española durante el resto de la guerra. También se cedió el uso temporal de los petroleros Chipre, Nevona, Giuseppe Ersoli y Marte y del aljibe Laura Corrado, amarrados en el puerto de Palma para abastecimiento de las unidades de la Regia Marina de paso y utilizados por los submarinos legionarios y las unidades españolas.

En diciembre de 1939, el almirante Moreno se reunió con el Generalísimo Franco. Le entregó una nota en la que, entre otras cosas, pudo escribir con el énfasis que suelen emplear los generales victoriosos, pero que encubría algo que había sido decisivo para el triunfo desde el punto de vista económico: «Nuestros buques efectuaron un gran número de presas, siendo un orgullo para mí el poder dar cuenta a V.E. que el enemigo no apresó durante toda la campaña ni un solo vapor nacional».

Visicitudes de la Flota de petroleros nacional

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Notas:

(1) El Ciudad de Valencia perteneciente a la "Compañía Trasmediterránea", fue convertido durante la GCE en crucero auxiliar. Entre sus acciones, se encuentra ésta con el Campoamor así como el famoso crucero por el mar de Norte en compañía de su gemelo Ciudad de Alicante. El Estado Mayor de la Armada conocía que estaban internados 17 buques españoles en puertos del Reino Unido, 12 en Leningrado, 6 en Amberes, uno en La Rochele y otro en Burdeos y que los buques internados en Inglaterra habían recibido orden de concentrarse en puertos rusos del Mar Báltico, por lo que procedió inmediatamente a formar una organización para controlar la navegación entre el Reino Unido y los estrechos de acceso al Báltico y evitar la pérdida de dichas unidades. En esta operación, el Ciudad de Valencia, el 2 de noviembre de 1938, hundió con sus disparos al Cantabria al no obedecer la orden de alto y consiguió apresar a la motonave Sil y el carbonero Río Miera.

(2) En la madrugada del 9 de febrero el sumergible legionario Ettore Fieramosca disparó 12 cañonazos contra los petroleros Campeador y Zorrosa atracados al muelle del contradique del puerto de Barcelona. El bombardeo fue repetido en la madrugada del día 19 sin resultado alguno.

(3) Se calcula que al menos 12 cruceros y 28 destructores italianos actuaron contra la armada republicana. 4 mercantes fueron torpedeados por destructores italianos y se realizaron 2 apresamientos. El destructor Saetta (capitán de corbeta Giovanni Cerrina-Ceroni) atacó al Campeador con torpedos. Al menos 3 tocaron al petrolero. El primero alcanzó la sala de máquinas, matando a 5 tripulantes. En total 12 tripulantes perecieron. El Saetta se hundió el 3 de febrero de 1943 al chocar con una mina británica sembrada por el minador Abdiel.

(4) En la noche del 26 de diciembre de 1944 el USS Barb (SS-220) descubría a millas de cabo Silleiro a un petrolero con rumbo oeste que, si bien navegaba con las luces de navegación encendidas, no tenía iluminado el costado ni la cubierta. Los aliados no tenían ninguna información del transito de buque español alguno por esta zona, por lo que el teniente de navío Watermann no se lo pensó dos veces y, puesto que se esperaba la partida del puerto de El Ferrol de dos petroleros alemanes allí refugiados, el Spichern y el Max Albrecht, a eso de las diez de la noche le envió un par de torpedos. El buque atacado era nada más y nada menos que el Campomames, de 6.276 TRB, de CAMPSA, que navegaba de Bilbao a Aruba, en el Caribe, en lastre. Alcanzado por ambos artefactos a la altura de la cámara de máquinas, sufrió un desgarro de ocho metros en el casco, por lo que comenzó a meter la popa y escorar a estribor. Abandonado en los botes por su tripulación. El buque quedó semisumergido, si bien pudo ser remolcado a Vigo por los tres bous y un remolcador. Durante mucho tiempo se especuló con el agresor del Campomames, ya que, tanto el Agregado Naval inglés como el alemán informaron a las autoridades españolas que no tenían sumergibles propios en aquellas aguas. Los norteamericanos, vista la metedura de pata, tampoco reclamaron la autoría y silenciaron el hecho, así como los informes y, solamente en los años 80, cuando se examinó documentación de estos buques se pudo constatar el hecho aquella patrulla el BARB había regresado con 20 torpedos, dos menos que su dotación normal, y que en la bandera de combate del buque aparecía una bandera alemana, por cuanto que el teniente de navío J.R. Watermann estaba convencido de haber hundido un petrolero germano.

(5) Estando amarrado al muelle de la Aeronáutica el Campero, hizo explosión el material de guerra que estaban cargando en una gabarra un grupo de soldados en las proximidades de aquel buque. Este material procedía del abandono del buque por la tripulación del Gobierno de la República en su huída. Al parecer, una trazadora penetró por la tapa abierta de un tanque que había contenido gasolina, sobreviniendo la explosión, que originó desperfectos de consideración. El reconocimiento del buque puso de manifiesto que había transportado material de guerra en los tanques de carga y que en la chapa quilla del tanque número 5, había incrustada una bomba de aviación que después de haber atravesado la cubierta principal, quedó haciendo de tapón imperfecto de fondo.

(6) En algunas ocasiones, los submarinos alemanes que detenían a un mercante en alta mar y al comprobar que era español, le pedían sin más algo de combustible. Así le ocurrió al vapor Aldeco en junio de 1942.

(7) El Plutón fue el primer buque que dispuso de motores diésel fabricados (bajo licencia) en España. Reacondicionado como petrolero de escuadra, fue enviado a Valencia en periodo de armamento en 1936. El 18 de julio de 1937, estando atracado en Barcelona, fue alcanzado por un disparo del crucero Canarias. Trasladó refugiados desde Cartagena a Orán. Al finalizar la guerra civil, se encontraba en Cartagena en muy malas condiciones.


Fuentes:

Sobre los petroleros de la CAMPSA (descargables en la página oficial de la CNE)
- CAMPSA: 1928-1958 (Editorial: CAMPSA. Año de publicación: 1958)
- Cincuenta años de CAMPSA (Juan Antonio Cabezas. Editorial: CAMPSA. Año de publicación: 1977)
- Cincuentenario de la Flota del Monopolio de Petróleos: 1927-1977 (Alfonso Martínez Gil. Editorial: Ministerio de Hacienda. Año de publicación: 1977?
Disponibles gratuitamente en: http://www.cne.es/cne/contenido.jsp?id_ ... uditoria=F

"La Marina italiana en la Guerra de España", de J. L. Alcofar Nassaes.

La Flota de CAMPSA:
http://www.vidamaritima.com/2007/06/la- ... ampsa.html

Sobre Sir Joseph W. Isherwood y la renovación de la flota de CAMPSA:
http://www.vidamaritima.com/2008/03/sir ... vacin.html

Sobre el torpedeamiento del Campomames:
http://zagalico.com/vidamaritima/?p=398

"La trama oculta de la Guerra Civil: los servicios secretos de Franco, 1936-1945". Autores Morten Heiberg y Manuel Ros Agudo. Editorial Crítica.

"El escudo de la República: el oro de España, la apuesta soviética y los hechos de mayo de 1937". Autor Ángel Viñas. Editorial Crítica.

http://www.buques.org/Navieras/Campsa/Campsa-1_E.htm
http://www.buques.org/Navieras/Campsa/Campsa-2_E.htm

LOS PETROLEROS DE 8.000 TONELADAS DE CAMPSA
http://www.vidamaritima.com/2007/07/los ... as-de.html

Fuentes de las fotografías:

- CAMPSA: 1928-1958 (Editorial: CAMPSA. Año de publicación: 1958)
- Cincuenta años de CAMPSA (Juan Antonio Cabezas. Editorial: CAMPSA. Año de publicación: 1977)
- Cincuentenario de la Flota del Monopolio de Petróleos: 1927-1977 (Alfonso Martínez Gil. Editorial: Ministerio de Hacienda. Año de publicación: 1977?


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